jueves, 23 de octubre de 2008

Viviendo un rato del pasado.



Anoche me acorde de ti, inevitable a veces que mi mente no navegue en aguas pasadas, inevitable no cerrar mis ojos de vez en cuando y verte mirándome fijamente con cara de niño bueno y labios de cereza exquisita.
A veces pienso que lo hago para escapar de la realidad y evadirme de su recuerdo y que no me duelan tanto los malos ratos que paso aquí en el presente, así por lo menos sé que todo pasa y que al final una termina recordando pero sin dolor.
Siempre pasaron muchas cosas para que no estuviéramos juntos y ante eso nada que hacer, solo dejarse llevar. (Aunque ahora suene conformista)
De vez en vez vienes a mis recuerdos y me pongo a pensar que habría pasado si el universo se hubiera confabulado para con nosotros.
Ayer recordé ese episodio que en su momento me causo tanta incertidumbre y por que no decirlo también pena. Lo recordaras a veces tú también?
Fue un día en que llovía torrencialmente y recibiste una llamada y como yo estaba acostada en tú cama y abrazada a ti fue inevitable no escuchar.
Una voz de mujer joven te decía: “te estamos esperando para comer, esta tú papá aquí en la casa y quiere que lo vengas a buscar, yo quiero aprovechar de verte y que conversemos unas cosas, te quiero mucho”. Recuerdo que se me paralizo el corazón y mi mente se imagino diez mil cosas, lo más cuerdo era que tenias polola oficial y yo sólo era la aventura del momento, era tanto lo que te quería que sin darme cuenta rodaron por mis mejillas unas lágrimas que delataban mi pena… pero no dije nada.
Me miraste, abriste tú billetera, me mostraste una foto de mujer y me dijiste: “recuerda esta cara porque algún día cuando te cuente de ella nos reiremos juntos”
Paso mucho tiempo antes de yo saber quien era ella y no recuerdo si reímos juntos o si fue tanto mi asombro por tú demostración de confianza que sólo callé.
Será que algún día al igual que con está historia, recordare las penas de hoy sin causarme el más mínimo dolor?
Será verdad que el tiempo todo lo cura?

Por ahora viviré en el pasado, hasta que esto ya no duela tanto.

6 comentarios:

Ale Morena dijo...

Estoy segura.
Estoy completamente segura que algún día recordarás esta historia y sonreirás agradeciendo a la vida por poder contarla.

Un fuerte abrazo amiga y recuerda aquel comercial de los pañuelitos Dualette... "no te quedes en el pasado, nena".

Elisa de Cremona dijo...

PERO ES QUE DOY FE DE ESO!!!!
NO SE OLVIDAN LAS COSAS, PERO HEAVY QUE SE ATENUAN Y DEJAN DE DOLER... uno las recuerda sin temblor en el pecho..

besotes

Marsu dijo...

... Y el destino se confabuló...
( y no me digas que ando perdida.. POR FAVOR!)
Cariños.

 kotto dijo...

es cierto lo que dice elisa, las cosas no se olvidan nunca pero ...sin duda dejan de doler...

besotesss

Kala dijo...

es cierto, las cosas no se olvidan, pero con el tiempo uno aprende a perdonar y saca la moraleja... te aseguro que llegará un día en que te levantes y te des cuenta que recuerdas muchas cosas pero ya no con dolor, sino con cariño... esa es la magia del paso del tiempo...
cariños

Marcelo dijo...

Muy lindo, me ha gustado el post, tiene pasion,saludos.